En esta novela, Elizabeth Gaskell narra la historia de Sylvia Robson. Sylvia es una joven que vive alegremente en una granja con sus padres y que al principio de la novela se muestra como una joven un poco frívola que solo se preocupa por la nueva capa que va a comprarse. A lo largo de la novela y por cosas que le van ocurriendo en su vida, Sylvia va creciendo y madurando. La vida de Sylvia se va a ver marcada por dos hombres. El primero de ellos es Philip Hepburn, el primo de Sylvia, comerciante en una próspera tienda del pueblo, religioso y con unos fuertes valores morales. El segundo hombre importante en la vida de Sylvia será Charley Kinraid, un arponero apasionado al que no le importa tener algunos problemas con la ley con tal de defender los principios en los que cree. Aunque al principio los dos hombres son bastante antagónicos y parece que uno es mucho más bueno que el otro, a lo largo de la obra vemos que, como todas las personas, los dos tienen sus luces y sus sombras y, en algunas cosas, no son tan diferentes.
Además, Sylvia se rodea de otros personajes que influirán también de una manera o de otra en su vida y su proceso de cambio y maduración: sus padres, Kester (trabajador de la granja y amigo de sus padres), Hester Rose y su madre Alice (amigas de Philip y posteriormente de Sylvia) o Jeremiah Foster (jefe de Philip).
El tema más importante de la novela es el amor, destacado ya en el propio título. Por un lado, lo que mueve el argumento de la obra es la historia amorosa de Sylvia y los dos hombres de su vida, Phillip y Charley. Pero no es el único amor que aparece en la obra. Hay amor apasionado, amor más tranquilo nacido de la amistad y la gratitud, pero también amor no correspondido o amor secreto (hay personajes que no pueden confesar nunca su amor a la persona a la que quieren). El amor romántico no es el único que aparece en la obra y que influye en Sylvia. En su proceso de maduración tienen mucho que ver también el amor que Sylvia siente hacia sus padres (es capaz de sacrificar su felicidad por la de ellos) y hacia su pequeña hija Bella (que en sus peores momentos es la única que consigue hacerla reaccionar y seguir adelante). También la amistad, que es otro tipo de amor, va a ser importante para Sylvia. Su amistad con Kester será su único desahogo en algunos momentos y la amistad con Hester y Alice influye también en el cambio de Sylvia.
La novela está ambientada en el pequeño pueblo costero de Monkshaven, en la costa noroeste de Inglaterra, un pueblo que vive sobre todo de la caza de ballenas y que vive con gran entusiasmo el regreso de los barcos balleneros cada vez que llegan. La historia se enmarca en los últimos años del siglo XVIII, durante las guerras napoleónicas. La guerra va a ser un tema importante en la obra también, ya que algunos de los personajes se ven afectados directamente por esta y son importantes las patrullas que aparecen en el pueblo intentando reclutar hombres para la guerra (en muchos casos a la fuerza). Estas incursiones de la patrulla en el pueblo van a marcar el destino de Sylvia y de otros de los personajes de la novela.
Una de las cosas que más destacan del estilo de la novela son las descripciones. Tanto los personajes como los espacios son descritos con bastante detalle.
A pesar de que es
una novela definida por la propia autora como la obra más triste que jamás
escribió y que no se puede decir que tenga un final realmente feliz, me ha
gustado mucho. Principalmente por cómo se presenta ese proceso de crecimiento
personal de Sylvia, cómo pasa de ser un personaje que puede no caer bien al
principio a uno con el que es fácil identificarse por las cosas que le ocurren,
aunque no siempre se esté de acuerdo con su carácter o sus acciones.
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