Es el primer libro de la trilogía protagonizada por Antonia Scott y Jon Gutiérrez. Antonia Scott es una mujer con una inteligencia superior a lo común que trabaja en un proyecto secreto conocido como Reina roja. Se dedica a resolver casos policiales, pero desde la sombra, como si no existiera. Pero Antonia vive atormentada porque el único caso que no logró resolver acabó con su marido en coma y ella siempre se ha sentido culpable. En esta ocasión, Antonia contará con la ayuda del inspector de policía Jon Gutiérrez. Al principio, ninguno de los dos está entusiasmado con la idea de trabajar juntos (Jon está allí porque ha sido suspendido de empleo y sueldo y se ha visto envuelto en un escándalo), pero, a lo largo del libro, va surgiendo entre ellos una gran amistad.
Según va avanzando la trama del libro vamos conociendo la peculiar forma de ser de Antonia y parte de su pasado. Vamos viendo también como surge esa amistad entre ella y Jon y nos vamos encariñando con ellos. Pero, sobre todo, lo que hace que no puedas dejar de leer es la intriga por saber qué ocurrirá, si Antonia y Jon podrán resolver el caso. El final tiene un giro inesperado que invita a leer las otras dos novelas de la trilogía, Loba negra y Rey blanco.
Además de tener unos personajes con los que te encariñas
y una trama con una gran intriga que hace que no puedas parar de leer, a lo
largo del libro hay muchas referencias a canciones, películas, comics, etc. que
en una primera lectura a veces pasan desapercibidas por querer leer rápido para
saber lo que ocurrirá. Lectura (y relectura) totalmente recomendada.
Me sirve para los retos:
Reto 24 retos de lectura: 12. "Portada roja"
Reto 44 temas lectores: 9. "Sucede en tu país"
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